jueves, 28 de septiembre de 2017

La Teoría del Cinismo

Te quiero. Pero dejaré de hacerlo, voluntariamente, silenciosamente, a escondidas pero delante de ti. Con miradas vacías y sonrisas fingidas que serán el plumero que limpia el oscuro sentimiento que renace dentro de mi, el cinismo. Lo siento. Uno recibe lo que da, por eso será mejor que te alejes, no porque como ilusamente piensas que me haces daño, eso ha pasado ya. Debes alejarte porque yo dañaré lo que queda de ti y no con mentiras, pues soy brutalmente sincero, sino con la terrible desilusión de la indiferencia.

Me sentí un conejito que saltaba en la verde grama, ahora me doy risa, ¿como pude llegar a eso? fue realmente patético, pero sin negar que me gustó, realmente me miro y concluyo que ese nunca fui yo, era un remedo cursi de la peor versión de un verdadero romántico, una ilusión de frenesí aprovechado por ese vestigio que quedaba en mi alma después de Jessika. Los rezagos de un corazón autodestrozado por mis propias mentiras. Los desechos del muchacho enamorado que murió a los 25 años.

Volveré a la ruta, pues encontré facilmente el camino, la ayuda vino desde el rincón menos pensado, desde el origen del problema, de la exánime tecnología que fácilmente atrapa. Además como un viejo lobo estepario, sin querer dejé un rastro que esperaba ser descubierto. Las señales escondidas del cínico muchacho embaucador de sentimientos, alguien que quería dejar en el pasado pero que la vida exige, no hay tregua, pensé que todo se había sosegado ya, pensé que dejaría el infierno de la mentira al decir te quiero sinceramente, pero la vida me dice no, despierta, vuelve a sobrevivir, arrastra tu conciencia y obten solo lo que te conviene, pasa por encima de todo y vuelve a la soberbia y al egocentrismo.

¿Ves? Por esto debes alejarte, huir, aunque no te dejaré, pues sirves a mi propósito final, eres ideal para no volver a cometer el error de la subjetividad sentimental. Poco a poco siento como vuelve mi temperamento, la racionalidad exenta de emociones, me preparo diciendo las mismas palabras cursis que me hicieron caer en el abismo del cual ya voy regresando, poco a poco, paso a paso, palabra a palabra, beso a beso.

Te ofresco disculpas, no por mis acciones, sino porque a pesar de todo lo ruin que soy, no me arrepiento, nunca lo hago. Las disculpas van por el tiempo que perdiste y perderás tratando de reparar algo que para mi no va a existir pronto. Besos. Te quiero.




lunes, 25 de septiembre de 2017

Regresa Alvarock!!!

Tal vez nunca me haya sentido tan vulnerable como ahora, me siento absolutamente inseguro, destruido sentimentalmente, incapaz de sobreponerme por mas intentos que logre, imposiblitado de concentrarme en cualquier cosa, con la mente absorta por culpa de una sensación irreconocible en mi.
Pero la culpa es mia, yo propicié todo esto al abrir la coraza que había construido, al derribar voluntariamente el muro de frivolidad sentimental que levanté con el paso del tiempo. Esto me hizo débil y ahora pago las tristes consecuencias de volver a utilizar los sentimientos.

Parece improbable, pero sé tambien que me recuperaré, solo necesito recordar lo que fuí, sentir el frío del cinismo, conosco de sobra ese camino, solo debo buscar la forma de enrumbar, deshacerme en silencio de los sentimientos que acogí. Olvidar. Volver al egocentrismo, al Alvarocentrismo, como antes, yo primero, yo segundo, yo tercero. Virar el timón pues la nave se averió y necesita los ajustes anteriores, necesito renacer cerebralmente, volver al existencialismo de Nietzche, a ser el superhombre ajeno a los sentimientos que destruyen la objetividad.

Sin embargo, a pesar de conocer el camino, estoy aqui, debilitado, con el corazón en la mano, con el cerebro apagado, esperando que el silencio haga su trabajo y me otorgue esa pequeña opotunidad de regresar a mi racionalidad. Volveré a construir una forteleza sobre la base solida de la razón pura y del cinismo sentimental. Y todo recobrará su equilibrio, mi mente y una realidad de la cual yo soy el que decide como sentir y que sentir, lo efímero será la consigna y no habrá mas dolor por una traición de alguien a quien dejé ingresar a mi mente pero se pasó al corazón.



domingo, 24 de septiembre de 2017

Blanco / Negro / Gris

Blanco.
Me quedo con tu mirada pícara de ojos oceánicos y con tu sonrisa de niña de labios carnosos y estéticamente prefectos. Con los semáforos en rojo y tu mano sobre la mía de camino a tu casa. Me quedo con tu cabeza sobre mi hombro recibiendo un tierno beso en la frente de mis labios agotados. Te quiero tanto, por eso me quedo con tu piel suave y blanca, con tu voz entrecortada y curiosa. Son mios, todos esos momentos, los dedos meñiques, las palabrotas que brotaban de la pasión. Tendré por siempre tu olor, el sabor de tu cuerpo, la calidez de tu aliento y la perfección de nuestros encuentros, en su mayoría, viernes por la tarde esperando la noche.

Princesa eso es mio. Todo. Tus risas, tu sonrisa, tus ojos, las salchipapas, los pollos, los besos, los abrazos, los te quiero, los apodos, las burlas. La sensación de ser la pareja perfecta se queda conmigo. Los planes incipientes de vivir juntos, tambien la idea que un día tu hijo se llame Freddie.

La forma en que empezó todo, la casualidad de llegar temprano y la sensación de que eramos el uno para el otro ¿lo crees? Yo si. Quiero estar contigo, quiero que estés conmigo, quiero tomar tu mano, quiero que te recuestes en mi hombro, quiero que duermas en mi pecho. Te lo repito, te quiero y pienso que podemos superar todo esto, que sea una anécdota, quiero que me abraces y me digas que ya todo pasó, que me quieres y que cojas mi cabello, te doy permiso. Quiero seguir conversando contigo todas las noches de cualquier cosa y reirnos de la vida. Quiero que confíes en mi y yo confiar en ti. Sin rencores, ni resentimientos, amarnos como empezabamos a hacerlo. Quiero levantarme todos los días pensando en ti y en timbrarte para que no llegues tarde al trabajo. Quiero mandarte mensajes a media mañana, quiero sorprenderte con flores y tarjetas que elijo pesimamente. Otra vez te digo, te quiero Dayane, princesa te quiero y quiero estar contigo siempre. Quiero que los viernes no acaben y que no acabe la noche.




Negro.
¿cómo pudiste hacerme esto? Me ofrecí totalmente, curé mis heridas del pasado, eliminé mis demonios para entregarte todo lo mejor que puedo ser, te dije que confies en mi. Ocultas y me mientes, mas de lo que crees que sé. Todos los te quiero se han ido por la borda, estoy triste y me doy pena ¿sabes por qué? - Yo he sido malo, muy malo. Pero justo contigo decidí darme un nuevo comienzo y mira lo que recibo, es triste y lo peor es que quiero ser el de antes, quiero vengarme, quiero hacerte lo mismo que me haces, quiero ser deshonesto, quiero que sientas lo que siento ahora yo, quiero que sientas el dolor de la desconfianza, la desolación de que otra persona tenga tambien mi cariño, quiero que las palabras te hieran, como me hieren a mi los pensamientos sobre lo que haces cuando yo no te veo, sobre lo que dices cuando yo no te escribo, sobre lo que sientes cuando te florean imbéciles y te sientes halagada. Dificil sacar eso de mi mente, pues en mi corazón no habrá nada, felizmente ese juego lo conozco bien. ¿Alguna vez te pusiste a pensar que pude haber sentido yo con todo esto? No. El infeliz soy yo pues te aseguro que si la casualidad no me hubiera hecho ver esos mensajes seguirías ocultandome y mintiendo descaradamente, sonriéndome a mi y también a él. Escribiendome a mi y recibiendo halagos de él. ¿Crees que debería creer que solo eran mensajes? La mente trabaja sola y tal vez hasta salieron sin que me lo comentaras, pues el pecado no es conversar, ni salir, el pecado es ocultar, pues lo oculto lo convierte en malo, una tremenda mentira a pesar de que siempre te ofrecí escucharte por mas doloroso que sea. Hemos fracasado y hasta ahora no entiendo que hice mal. Te quiero si. Pero se irá, el sentimiento se irá y estoy absolutamente seguro que para ti será mas fácil, pues puedes seguir con tus estúpidas conversaciones ocultas, y cuando encuentres a otra persona que te toque el corazón, lo arruinarás, pues no sabes querer.




Gris.
Esto es lo que siento Dayane. Una terrible sensación de dualidad, algo que me dice, ámala y otra parte que me dice, déjala. Ya antes te comenté, soy extremadamente inseguro, sentimentalmente estoy dañado por el pasado y para ti me reconstruí. Has sacado lo mejor de mi y sé que eres una buena persona, sé que me quieres, pero es inevitable no sentir lo que siento. Tal vez todo lo negro sean divagaciones mías, pero es lo que soy, tómalo o déjalo.

Creo que será dificil reconstruir la confianza, si eso quieres, yo estoy dispuesto, pero dejaré todo a tu desición. No tengo el valor para alejarme de ti porque no quiero hacerlo. Todos cometemos errores y yo no soy presisamente un santo, te quiero y quiero entenderte, quiero abrazarte, ahorita, en este momento, pues a cada palabra siento que caigo cada vez un un hoyo mas profundo y quiero que me tomes de la mano.

Tómate el tiempo que necesites para decidir, yo tomaré tu decisión con madurez necesaria para disponerme a enmendar nuestras heridas o para alejarme y tomar distancia en tu vida. Y por favor, no te disculpes, no eres una tonta, tu tambien me alegras los dias solo es cuestión de comunicar las cosas que son importantes y que pueden involucrar problemas con los que nos quieren. Te quiere a pesar de todo y a pesar de cualquier decisión. Alvarock


















miércoles, 13 de septiembre de 2017

La Paradoja de ciego.

Ni siquiera a tientas. Todo es oscuridad, absoluta, inerme, oceánica, aplastante. Como dormir todos los días, como morir todas las horas, como vivir en un extenso y desolado campo negro por todos lados. Esas son sus noches, las noches en las que lo envuelve el silencio de la gente dormida, las noches en donde los amantes descansan y los solitarios dormitan.

El ciego siente los sonidos, no escucha, leyeron bien, siente. Siente los ruidos de la calle, el maullar de un gato, el motor de un auto antes de arrancar, las voces en conversaciones fútiles, pero lo más importante, siente la mentira en la voz de las personas.

Siente la mentira y calla. Siente la mentira y ama. Siente la mentira y tiembla porque sabe lo que eso significa. El ciego escucha el temblor de las respuestas, el ciego se percata del delicado tono de las voces traidoras y aun así insiste en mostrar una cálida sonrisa o una amable palabra.

El ciego, es ciego pero no tonto, advierte las patrañas pues a lo largo de su vida hizo uso de incontables mentiras que lo sumieron en el nirvana, además entiende que normalmente la gente siempre miente, oculta, reserva para sí mismo, lo que nadie debe saber.

Sin embargo, la sonrisa de su rostro se borra cuando advierte que hay más mentiras detrás de la mentira descubierta, cuando, él invita a la sinceridad y recibe patrañas ocultas en palabras falsas. Nunca ha funcionado y lo sabe: invitar a las personas a que sean sinceras, paradójicamente, mienten más, ocultan más y el ciego no aprende aún a convivir con eso. Por eso calla, por eso enmudece y vuelve al absoluto vacío de sus ojos, llenos de oscuridad, repletos de desolación.

Le duele, lo siente, pero estoicamente mostrará siempre su sonrisa, la implacable sonrisa que requiere una sociedad hipócrita y llena de prejuicios. Llena de gente que oculta sus sentimientos, buenos o malos, en canciones, en frases, en fotos.

He aquí la paradoja del ciego, escuchar las mentiras y callar, pedir y mostrar sinceridad y recibir peores mentiras que siempre ocultarán algo que él conoce muy bien: el camino a la soledad. Abuen entendedor, pocas palabras.


lunes, 11 de septiembre de 2017

El camino

Siempre hay veces en la vida cuando uno siente que está en el lugar correcto pero en un momento equivocado. Exento de arrepentimientos y preguntas vanas te das cuenta que eres el viaje y no el destino, a pesar de estar maravillado por el paisaje que deslumbra tu retina opacada por el pasado. A pesar de las sonrisas entiendes que no durará mucho, que terminará pues ella encontrará su destino, el final por el cual siempre se ha equivocado.

No hay problema con eso, sé que soy el camino y no puedo ser el final, la meta, el destino, no me entristece, solo me da curiosidad la vida, ponerme a prueba después de todo, después de nada, cubrirme de sentimientos que no quise sentir.

Yo ya fui destino y me perdí, yo ya fui final y terminé por desperdiciar todo. Quiero ser tu viaje, quiero ser tu camino que tiene fin, no quiero ser un bonito recuerdo, quiero ser un gran recuerdo, inconmensurable, quiero que cuando encuentres tu final, tu destino, pienses que debiste quedarte viajando conmigo, caminando para perdernos juntos y lo mas importante, quiero que eso sea demasiado tarde, que ya no haya esperanzas para nosotros, ni contratos de hijos, ni palabras empeñadas, ni dedos meñiques, quiero yo ser el viaje absurdo que dejarás por un destino que eliges sin pensar.